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Con la cooperación del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente y la Unión Europea, el Corredor surgió en el 2007 y se proyecta como valiosa oportunidad para hacer frente a las consecuencias del cambio climático y a los riesgos y vulnerabilidades de estos territorios insulares.
Publicado por la Agencia Prensa Latina, vía Google Noticias
Santiago de Cuba, 30 de enero (PL).- El interés de sumarse a Cuba, Haití y República Dominicana en la delimitación y establecimiento de un Corredor Biológico en el Caribe se revela hoy como potencialidad en la Cooperación Sur-Sur, según expertos.
El doctor Nicasio Viña, director técnico de la Oficina trinacional del proyecto, destacó que Jamaica y Puerto Rico se desempeñan como observadores y el propósito es expandirse con el objetivo de salvaguardar el entorno natural en armonía con el desarrollo económico y social.
Viña, académico titular de la Academia de Ciencias de Cuba, agregó que varias organizaciones, como Agro Acción Alemana y el Centro para el Desarrollo Agropecuario y Forestal, coordinan acciones con esta iniciativa, fundamentalmente en el impulso a los proyectos piloto.
Afirmó que otras naciones del área han mostrado su disposición a integrarse al Corredor y encomió el nivel de cooperación regional logrado por la oficina, con la participación de especialistas cubanos, haitianos y dominicanos, altamente preparados y conocedores de estos ámbitos naturales.
Como uno de los éxitos del empeño aludió a la estrecha relación de esos expertos con cada uno de los puntos focales de los respectivos ministerios de Medio Ambiente de los tres países, como las fundamentales entidades que lo auspician.
Entre las más recientes actividades realizadas están la presencia en la I Feria de la Biosfera Jaragua-Bahoruco-Enriquillo, en República Dominicana, y el primer curso de entrenadores, impartido en la Reserva Natural Siboney-Justicí, junto con el Centro Oriental de Ecosistemas y Biodiversidad.
Participaron en el entrenamiento activistas de las comunidades de Verraco, Granma, Siboney y Gran Piedra, que a partir de esa capacitación pueden contribuir de mejor manera al cuidado del entorno y a una relación amigable en pos del desarrollo sostenible.
Como parte de estos esfuerzos conjuntos visitó áreas de interés del oriente cubano el ministro de Ambiente de Haití, doctor Jean Francois Thomas, quien apreció la factibilidad de los pequeños viveros, que a pesar de los modestos recursos, significan un notable aporte a las faenas de reforestación.
Con la cooperación del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente y la Unión Europea, el Corredor surgió en el 2007 y se proyecta como valiosa oportunidad para hacer frente a las consecuencias del cambio climático y a los riesgos y vulnerabilidades de estos territorios insulares.